TU

Esto no es poesía. Esta soy yo: desbordandome...

jueves, 31 de diciembre de 2015

365 oportunidades

Estamos a unas horas de cerrar el año, y pienso… si lo que traigo en el interior se cerrara junto a él o el pecho siempre queda abierto. Supongo que lo segundo. Hay cosas que no cambia de la noche a la mañana, si pudiera ser así, todo sería más fácil nada tendría sentido y las cosas perderían valor. 

Se abren las puertas a un nuevo año y yo, yo sigo llorando una ruptura. Y tengo dos cosas atravesadas en el pecho: el miedo y la esperanza. El miedo a que todo acabe; los recuerdos su presencia en el aire, en los días, en los lugares, en mi pecho, mi cabeza y mi alma. Esperanza a entrar a un año vacío; Vacío de presencias, de recuerdos, de días felices, de días tristes, un lugar vacío que puedo volver a llenar de cosas nuevas, de sentimientos nuevos. De comenzar por fin a ser libre. Libre de sentimientos, libre de ataduras, libre de recuerdos, de sombras en los días, libre de verdad. Tengo dos puentes abarcando mi pecho y todavía no sé por cual cruzare esta noche.

Este no fue el mejor año, pero tampoco fue del todo malo:

Lo empecé mal, con dudas, con un vacío infinitamente grande que trate de llenarlo de lo mismo que se había vaciado, y no pude, no lo logre, lo intente y lo anhelaba desde el fondo de mi alma pero fracase. Lo perdí, lo perdí todo, a él, a mí, las ganas. Lo último que quedaba lo invertí, lo aposte pero no resulto. Y así se fueron los primeros meses entre ganas y desgastes, entre lágrimas y fe. En un solo enfoque todo. 

Y hasta que por fin llego la factura de todo lo invertido, de los juegos a luchar y supervivencia, de las inversiones de más. Se acabó. 

Si, este año perdí a alguien a quien amaba, pero antes de eso perdí la alegría, las sonrisas desde el alma, deje de brillar para convertirme en la sombra de alguien en donde nunca lo fui. Perdí la fuerza, la confianza y seguridad de mi misma. Perdí lágrimas a litros. Perdí mi interior, perdí mi yo. 

Perdí una gran parte de mí, por la que hubiese estado dispuesta a todo, pero las cosas al fin acaban, y uno se da cuenta que no puede seguir forzando al amor donde ya no quiere estar. Ha pasado ya quizá suficiente tiempo, y he tratado de sobrellevar esta mala racha de la mejor manera posible y maduramente. No voy a mentir, a veces cuesta. Cuesta mucho. Todo ha llevado su proceso, que ya contare después, cuando este por concluir...

Bueno, por otra parte si dejamos a un lado esta mala racha y olvidamos esa parte, pues mi año no del todo fue un fracaso, digamos que fue un año al que sobrelleve. 

En la universidad parece que todo pintaba bien, termine de cursar el área de social, y aunque una parte de ella me atrae muchísimo, hubo otra que no es de mi total agrado.

Inicie mi quinto semestre en el área educativa. En un principio aunque estaba un tanto destrozada, me emocionaba comenzarlo, me sentía nerviosa y un poco de miedo entraba por mis venas. Creí que sería uno de los semestres más pesados y cansados en el que lo mejor sería que aprendería muchísimo. Y si, sin duda fue cansado y agotador pero no por las tareas, fue agotador por todos los sentimientos que cargaba y tenía que guardarlos para sacarlos después cuando tuviera tiempo. En realidad, debo decirlo mi semestre fue un ¡asco! A lo que se refiere académicamente. En especial podre énfasis en la materia que se supone es una de las más importantes de la carrera, practica supervisada (clínica), Este semestre empezamos a tener nuestros primeros pacientes. Bueno yo estaba emocionadísima, primero no sabía que clínica elegir, me refiero al lugar de las clínicas, tenemos 6 clínicas, pero opte por la más cercana, para no complicarme la vida aun a pesar de que nos habían comentado que el profesor no era uno de los mejores, bueno, uno apuesta y se arriesga. Y ahí tengo mi resultado: un profesor extraordinariamente; patético y nefasto, de verdad, lo vomito, lo vomito, lo vomito… En toda mi vida como estudiante no había sentido tanto aborrecimiento por algún profesor. No soporto verlo, no sé, de verdad se me revuelve el estómago con verle la geta. En todo el maldito semestre lo vimos como 5 veces en la clínica. Se supone que nos debió haber dado teoría antes de comenzar a trabajar con nuestros pacientes, nos llevamos 3 semanas (2 clases a la semana de horario completo) con un estúpido concepto el cual nunca concluimos. En mi segunda clase me di cuenta que era el tipo de profesor que da clase para ir a perder su tiempo. Nunca superviso nuestro trabajo con los pacientes, jamás nos mostró nuestros errores ni nos indicó que lo estábamos haciendo mal o bien. Por suerte yo ya había trabajado anteriormente con niños, pero eso no me iba a resolver la clase. 

Tuve dos pacientes; una adolescente de 13 años con problemas de conducta, bajo rendimiento escolar, evidentemente problemas emocionales para relacionarse con las personas y el principal, la raíz de todos, problemas de apego con la madre. 

Mi segundo paciente fue una niña de ocho años con problemas de distracción y bajo rendimiento escolar, y el problema mayor; Enuresis.

Así que tenía que arreglármelas como pudiera, con apoyo de otros profesores y compañeros saque a flote mi trabajo como educadora porque esta demás decir que la materia la pasamos excelente. Si, todas con 10 como calificación, un 10 así, nunca lo he aprendido a saborear. 

De verdad da pena y sobre todo lastima ver este tipo de gente, yo pienso que para dedicarse a algo lo primero que uno debe de tener es vocación, no basta con querer jugar al maestro, o al medico, y creer que en todo eres experto y a todo te puedes dedicar. Por ejemplo hoy sé que definitivamente mi vocación no es trabajar con niños de 6 a 11-12 años, tal vez con los de estimulación temprana me agradaría mucho, pero lo mío, lo mío es trabajar con adolescente y adultos no tengo duda de eso. 

No todos mis profesores fueron malos, tuve por lo menos a dos muy buenos sobre todo la profesora G. aunque solo la tuve una clase de 2 horas a la semana me agrado mucho su forma de enseñar y transmitir.

Uuuf! Voy por el sexto semestres señores!!! ¡que emoción! Y que nervios; ahora que ya conozco algunos profesores del área, tratare de meter a los mejores, aunque mis amigas quieren seguir en el libertinaje y están de necias de seguir con ese profesor de asco, yo definitivamente si tengo la oportunidad de cambiarlo no lo duden que lo voy hacer, para ser sincera a veces me desespera ver tanta frivolidad y superficialidad en ellas pero cada quien, yo sé lo que quiero y eso es lo importante, tengo otro grupito de amigas que aunque este semestre por cuestiones de tiempo por las clínicas y diferentes maestros convivimos muy poco, pero ellas a pesar de que a veces también me desesperan porque son muy tranquilas, me agrada mucho más su forma de pensar, no están huecas del cerebro, tienen esencia y espíritu y sobre todo lo que me encanta de ellas es que tienen un amante como yo, si, un amante por quien luchar y que las hace feliz aunque no todo siempre este bien, un amante que no precisamente tiene que ser un hombre; leen, les gusta el cine, el deporte, el arte en fin cosas de esas que llenan la vida. Y las otras, sus amantes son muy bajos; los hombres, el dinero, las fiestas, el alcohol, el libertinaje, control. Y aunque a mí gusta un poco de todo eso, siempre termina por aburrirme y a veces hasta por hartarme muy rápido. Y sin embargo valoro y quiero a mis dos bandos, lo malo es que con alguno, alguna vez, siempre quedas mal.

En cuanto a todo lo demás que se refiere a la universidad fue estupendo, tuve diversión, volví a bailar como nunca, a salir, a divertirme. a conocer gente nueva, cierro y abro puertas. Tuve a las amigas más locas del semestre, no cabe duda fuimos dinamita y sensación. Si, lo mejor del semestre fueron las loquísimas de mis amigas, nuestras compras, nuestras salidas, las pláticas y las risas, me devolvieron mucho y sin que lo sepan me ayudaron mucho a seguir. Con ellas no se puede uno estar quieta, sin duda este ha sido a pesar de todo uno de los mejores semestres de diversión. 

Este año regrese trabajar y bueno no puedo quejarme de mi trabajo aunque suelen aburrirme pronto, esta vez he durado ya, y no, no piensen que no me he aburrido, por suerte llegaron las vacaciones y estas me ha salvado de renunciar. La verdad es que por el momento estoy bien, tengo privilegios que difícilmente obtendré en otro o quien sabe… Sé que debo de mantenerlo mi 2016 viene pesado.

En casa y mi familia parece que todo va bien, he venido a visitar a mi abuelita y su presencia siempre abriga y cura mi corazón, no importa donde este; mi madres y ella son mis dos grandes pilares… la verdad no tenía ni ganas, ni quería venir a este lugar pero me alegra que siempre exista alguien que te haga volver a sitios como este. 

A veces siento que me descuido y en los últimos meses vaya que me he descuidado lo peor de todo es que no me importa. Este año tuve problemas de salud, bastantes, fue complicado y en parte esto de forma indirecta también afecto mi parte emocional, claro una cosa como la salud puede bajar no solo las defensas, también las ganas y la alegría perjudicándote emocionalmente y bueno como lo notaran todo se me junto, no fue fácil pero por suerte me alegra que por fin se acabe este año y con él todas las malas rachas. Voy mejor, me voy recuperando un poco de todo, no me doblego. Las ganas y el entusiasmo me empiezan a volver poco a poco y sé que todo ira mejor… 
Y me alegro, creo que es la primera vez que hablo de futuro y no de pasado pero siento que mañana voy a volver a llorarle...

¿Y que depara el 2016?

para mi significa 365 oportunidades señores, Que no quiero desaprovechar. 

Como ya dije, mí 2016 todo pinta para ser un año muy ocupado les aseguro que cada vez tendré tiempo de nada; entre el trabajo, escuela, tareas, cursar inglés y amigos. Tengo pensado algún que otro proyectito chiquito pero bueno todavía está en idea, tengo algunos planes, planes pequeños a corto plazo soy enemiga de los planes a largo plazo y para vida futura aunque siempre llevo alguno por ahí escondido, pero no me fio de ellos, terminan por destrozarte a veces no solo el momento, sino la vida. 

Tendré 365 oportunidades que no pienso desaprovechar, será bueno, muy bueno lo presiento, tiene que ser así ¿no dicen que después de la tormenta viene la calma? bueno pues ya es justo. 

Estoy conmocionada estoy a prácticamente un año de terminar la carrera y bueno un año siempre se pasa rápido, me emociona mi graduación y lo que pueda hacer antes de terminar, me emociona por fin lograr uno de mis objetivos (y pensar que faltan bastantes…). Me conmueve pensar quien o quienes estarán en mi vida para entonces compartiendo mi logro, de quienes serán los brazos que me estrujen, si habrá alguna mano que este entrelazada en mis dedos acompañando a un nuevo comienzo. Me da curiosidad ¿Cómo será? 

Incluso con mis amigas ya hemos hablado de lo que nos gustaría hacer para nuestra graduación -estamos tan locas- hasta la nostalgia ya se me ha adelantado y me ha brotado; se acaba la universidad, y no solo significa un logro, significa mucho más: un inicio. La responsabilidad no solo contigo sino con la sociedad, luchar solo contra todo, aguantar y no perderte. Un inicio a la guerra de tu vida que puedes ganar y divertirte y aprender mientras combates pero no desviarte. 

Uno cambia de eso no hay duda pero uno decides si ser una porquería de persona o ser una persona que valga la pena en este mundo, que viva para uno mismo o que sepa vivir para con los demás; creo yo, que no nos deberíamos olvidar de quienes somos, de dónde venimos, lo que queremos y a dónde queremos ir, y… -SOBRE TODO NO OLVIDAR LO QUE QUERÍAMOS ANTES DE HABER LOGRADO Y TENER LO QUE QUERÍAMOS, ADONDE QUERIAMOS IR, Y QUIENES QUERÍAMOS SER- 

Tengo fe en que este será un buen año, quizá me lo debo. Y lo que si espero, es leer el doble de libros que este año uuf aunque con lo complicado y poco tiempo que viene espero poder lograrlo, este año me atore con los diálogos de platón pero por suerte ya acabe el primer tomo y tengo una lista grande de libros por leer así que deséenme toda la buena vibra para leer los suficiente este año. 



Por último, si has terminado de leer este texto, gracias. Gracia por tomarte el tiempo, gracias por ser parte de este pequeño espacio y por no irte y abandonar mis letras. 

¡Feliz año nuevo! Les deseo la mejor vibra y un fuerte abrazo hasta el rincón de sus hogares. ¡¡¡FELIZ 2016!!!



¡2016 te voy a sorprender!



martes, 29 de diciembre de 2015

Sigo temblando

Me hizo temblar entre sus brazos en mil y una madrugadas y ahora consigue que tirite sin tocarme, pero de dolor y de tristeza. Me duele cuando está pero me mata cuando no está, me consiguió marchitar, fumándose falsamente cada uno de mis besos y doblándome ante los recuerdos, ante anhelos que parten mí cuerpo en dos porque él me falló y ahora me ha dejado sola ante algo que me quema y que me viene demasiado grande, y me consume el saberme queriéndolo, y me destroza que me ha dado sin paracaídas, y me mata el no recordar su último beso porque nunca pensé que lo seria, y no puedo con el hecho de no saber qué fue verdad y qué mentira, y me deshace el querer odiarlo y olvidarlo en un día y darme cuenta de que mis veintitrés semanas no se borran de golpe, aunque sea de su propio puño.

Y ojala pudiera reventar su recuerdo de un golpe limpio y hacerlo desaparecer… Pero el siempre sigue ahí, incrustado en mis pulmones como un clavo oxidado que no deja respirar, tatuado en el alma como un día le dije al prometerme que jamás se iría de mí, como un nudo cuerpo a cuerpo y espalda contra espalda anclado en mi garganta e impidiéndome vivir, como un solo desafinado hambriento debajo de mis uñas, como un recuerdo inventado tras la almohada cada madrugada que los gritos de mi cama me despiertan… Y yo sigo temblando.

domingo, 27 de diciembre de 2015

Hoy tengo miedo -Fobia


Hoy tengo miedo de salir otra vez
tengo miedo de encontrarte como aquella vez
los nervios me traicionan me derrota el estrés
sé que puedo arrepentirme después.
Hoy tengo miedo de salirte a buscar
tengo miedo de poderte encontrar
tengo miedo de tus ojos, tengo miedo de hablar
tengo miedo de quererte besar.
Me digo no seas tonto
no seas tan escéptico
no trates de escapar.
Hoy tengo miedo de volver a bailar
tengo miedo que te puedas burlar
me dan miedo las personas no quiero manejar
tengo miedo que me pueda gustar.
Hoy tengo miedo de salir otra vez
tengo miedo de volver a caer
me dan miedo las mentiras ya no tengo más fe
tengo miedo de volver a creer.
Y digo no seas tonto
no seas tan escéptico
no trates de escapar.
No todos son tan malos, no todo está mal
no todos son villanos queriéndote matar
no todo está perdido ni se va a acabar
la vida es un pic-nic...


miércoles, 23 de diciembre de 2015

Hasta la raíz -Natalia Lafourcade

Sigo cruzando ríos
Andando selvas
Amando el sol
Cada día sigo sacando espinas
De lo profundo del corazón
En la noche sigo encendiendo sueños
Para limpiar con el humo sagrado cada recuerdo

Cuando escriba tu nombre
En la arena blanca con fondo azul
Cuando mire el cielo en la forma cruel de una nube gris
Aparezcas tú
Una tarde suba una alta loma
Mire el pasado
Sabrás que no te he olvidado

Yo te llevo dentro, hasta la raíz
Y por más que crezca, vas a estar aquí
Aunque yo me oculte tras la montaña
Y encuentre un campo lleno de caña
No habrá manera, mi rayo de luna
Que tú te vayas

Pienso que cada instante sobrevivido al caminar
Y cada segundo de incertidumbre
Cada momento de no saber
Son la clave exacta de este tejido
Que ando cargando bajo la piel
Así te protejo

Aquí sigues dentro

Yo te llevo dentro, hasta la raíz
Y por más que crezca, vas a estar aquí
Aunque yo me oculte tras la montaña
Y encuentre un campo lleno de caña
No habrá manera, mi rayo de luna
Que tú te vayas, que tu te vayas...


domingo, 20 de diciembre de 2015

Y bailare sobre tú tumba


¿Dónde estás? 
¿dónde es que andas? 
ya te has ido... 
has vuelto a los brazos 
de los que muchas veces 
te escuche hablar, 
los que decías 
te hacían daño 
a los mismos brazos 
que rodeaban tu soledad 
y encerraban tu espíritu, 
has vuelto a tu condena 
de siempre, 
a tu condena perfecta 
y quizá estés pensando 
que no es así. 
Que me equivoco 
y te aferres 
a las cosas buenas 
que tiene. 
Quizá te engañes 
para sobrevivir, 
quizá esta sea 
tu propia tumba 
la que estas cavando para ti.
Pero -en el lugar que mueres- 
poeta mío, 
-tu musa no está-. 
 ¿Sabes algo? 
Yo también 
ya emprendí 
mi camino.

jueves, 17 de diciembre de 2015

Espero curarme de ti

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad.
¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada.
Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»… Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).

Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón.

-J. S.

lunes, 14 de diciembre de 2015

Y por eso escribo

¿Por qué escribo?  ¿De quien escribo? ¿a quién le escribo?.
 ¿Es verdad, es mentira o mitad y mitad?
¿Importa? ¿De verdad importa?...

“yo sólo se escribir cuando tengo el corazón roto” es una frase que en mi vida he aplicado en varias ocasiones. Desde niña me ha gustado escribir, esconderme entre las paredes de mis letras es la huida más cercana a una salida que encuentro. Hay momentos buenos, hay momentos malos, a veces escribo mucho a veces poco,  otras nada. Creo que este es el único año que mi blog llegara con 100 entradas, por suerte mi diario hace tiempo que no sufre las consecuencias, por cierto un diario que había abandonado y al que le debo un par de páginas por escribir, las ultimas justo para cerrar el año y también ciclos. Llevo desde los 8 años escribiendo un diario, y este año que viene lo retomare, no sé en qué momento deje de escribir en él y me olvide de escribir recuerdos, quizá para no revivirlos. Ya no importa (ya no quiero que me importe).

Escribo de todos y de nadie, así mismo para quien tenga la sensibilidad de leerme y para nadie, solo para mí.
Este lugar es un desperfecto desorden, todo está aquí, la verdad, la mentira, la fantasía, el pasado el presente, el futuro, mi imaginación, lo deseos, lo que es y lo que no es.
Las dudas.

Este lugar existe justo porque aquí puede ser todo lo que no es.

Le escribo a mi pasado, cualquier pasado del más lejano al más cercano, a mi presente,  a el futuro del que no se puede escribir porque aún no existe y se convierte en fantasía, en deseo.

No hay un hombre.
Hay heridas.

Y justo como tantos, escribo para salvarme para acariciarme las heridas con letras.
Vamos, no todo es melancolía también existe para remarcarme las sonrisas, ¡lo juro! para no olvidar, aunque viva escribiendo que quiero borrarlo todo y olvidar,
¡Maldita sea!
¡No!
No quiero olvidar,
no quiero olvidar absolutamente nada.

He escrito poemas que me han enchinado la piel, y me han puesto a llorar como tonta, he compartido textos que me han escrito sólo porque creo que merecen ser leídos por alguien. Porque ahí, vuelo y salvo, no estoy rota pero al final sólo es eso un escrito más por alguien que me extiende la mano para salvarme y rechazo, y se pone en mi lugar, me convierte en su musa a la cual no tienen acceso.
Así somos…  ¿los poetas? ¿Los escritores? Vamos, los que escribimos, parece siempre que escribimos de millones de personas, y si pero no todas las historias nos pertenecen. Y otras las más usuales, convertimos una sola persona, una sola historia en miles, para darle los distintos colores, sabores y finales que en su momento no se pudo.  
Así es, todas las respuesta están aquí. Pero siempre es más fácil encontrar las dudas.
O inventarnos una salida para escapar.
Y sí, siempre optamos por la salida más cercana.
La oscura y sucia, para dramatizar la victoria delante de lo mártir.

Pero solo existen las respuestas enredadas y las dudas clavando.

domingo, 13 de diciembre de 2015

Me niego a escribirte con dolor y por eso te escribo con fuerza

No, no, no, no, no, no, me niego. Me niego a creer que el amor es una fuerza tan débil. Me niego a pensar que el amor es una fuerza que se acobarda. Me resisto a creer que una tarde soleada se opaca por una noche lluviosa. Me niego a aceptar que lo que un grupo ve en la cara de dos enamorados retrocede ante negativas que no vienen del corazón. No acepto la idea de que "lo correcto" ahuyente lo perfecto. No, no y no voy a silenciarme ante palabras que intentan sofocar actos. No hay forma que reconozca tu partida después de tus abrazos, después de tus besos, después de tus te adoros o tus te quieros. Jamás voy a dar un paso atrás cuando he escuchado un yo más cuando digo te quiero, cuando te despides con dolor de mi en un andén de metro que no parece sino el escenario de un romance hermoso. Me niego, G......., me niego a dejarte ir sin luchar porque ¿marchamos juntos en lucha dos veces para contradecir el espíritu combativo con un sí, me resigno? Me niego a que la fuerza que me abrazó en la tristeza me quiera hoy de vuelta en la oscuridad de la desesperanza. No reconozco tu ruptura ni tu partida. No creeré que las canciones y los textos y el piano y la guitarra han sonado por historias breves y agotables. Me niego a no quedarme contigo. Me niego a que el amor que me tiene dando vueltas a las cuatro de la mañana, sin hambre, sin sueño, sea alejado por una resignación falsa. Me niego a llorarte porque quiero reírte. Me niego a olvidarme del olor de tu cabello. Me niego que tengas miedo. Me niego a tenerlo yo. Me niego a la pasividad con la que recibo tus palabras porque no soy un pasivo, soy fuerza y lucha. Me niego a no verte mañana y pasado mañana y el resto de la vida si el amor así lo quiere. Me niego a no enfrentar el dolor futuro de una desgracia por permitir el dolor presente de un falso desamor que nos hace frente; falso y engañoso. No acepto, no acepto, no acepto tus palabras de esta noche, cuando éstas le mienten a las palabras de esta tarde. No voy a soltar tu mano. No voy a dejar tus brazos colgados de tu cuerpo, sin los míos, sin mí. No voy a acobardarme ni a resignarme ni a dejarte ir. No voy a comenzar de vuelta sin ti. Me niego a hacerlo y no voy a hacerlo. No voy a mirarte caminar de espaldas a mi, a las ganas, a los sueños, a lo bello sólo porque es correcto. No voy a callarme una vez más porque sé dónde despiertan tus sueños y tus ganas de volar y sé que tengo que ver con ellos. No voy a olvidarme ni a terminar de esta manera. No te voy a dejar partir. No te voy a dejar ir de mí, no te voy a dejar ir de mí, no te voy a dejar ir de mí. No, porque no quieres. No, porque no quiero. No voy a vivir sin ir al cine ni a la montaña ni a los tacos. No voy a vivir sin presentarte a mis amigos ni conocer a los tuyos. No voy a morir sin haber sabido lo que se siente dormirte a besos y despertarte a besos. No voy a vivir sin que hayas conocido mi casa. No voy a vivir sin tu piel, sin tu cuerpo, sin tus mordidas y chupetes. Me niego. Me niego. Me niego. Me niego porque te dejé mi corazón y en unas cuantas semanas lo reanimaste, lo fortaleciste y lo hiciste crecer. Me niego porque me quitaste el frío, porque me recordaste lo que es el amor y lo que es sentirse amado. Me niego y si no me contestas tendré que buscarte, porque tú me necesitas como yo a ti. Y si he de destruir muros y montañas para entrar en tu vida lo voy a hacer. Me niego a tener miedo y dolor porque eso no es el amor. Me niego a escribirte con dolor y por eso te escribo con fuerza, ganas y voluntad. G....... no me voy a rendir.

-IAD

sábado, 12 de diciembre de 2015

Las cosas han cambiado;

En un principio estaba segura de lo que no pasaría,
Estaba segura de una sola cosa.
No abandonaría lo que era mío
lo que tenía conmigo.
Pero las cosas cambian…
Y con el tiempo mi seguridad.
Conforme pasaban los días;
las visitas por la noche en su coche
se hacían más frecuentes
cada vez fueron atrapándome más y más.
Cada noche en que sus besos me seducían
con una perfección casi matemática
y es que la oscuridad de la noche
se complementaba tan bien con nuestros cuerpos,
con sus besos, sus caricias,
que sabían perfectamente erizar mi piel.
Su voz…
El sonido de su voz que me atrapa.
Hace viajar mi mente,
su voz como melodía de vida para mis oídos,
la voz que me envuelve y seduce con su magia…
No hay duda, algo cambio.
No es solo el sonido de su voz
lo que me atrapa
ya no es solo la manera en que suelta sus palabras,
ya no es solo aquel hombre que me invita
a saciar mi loca curiosidad.
También son sus besos, sus caricias,
la manera en que me mira. 
En que abraza
la sinceridad que siento cuando
me dice: “TE QUIERO”
ya no es solo el hombre
que aparece por las noches
y me roba  el sueño entre sus brazos y su boca.
Ha empezado a aparecer
en cortos pensamientos de mis días
se empieza a escapar entre mis suspiros.

Las cosas cambiaron.
Las noches han confabulado en mi contra
y no me han dado tregua.

Ahora me quiero ir, pero estoy perdida.


Yo hice todo lo posible para poder estar contigo.
En cambio tú dejaste de luchar mucho antes de la guerra
por tu propia voluntad.
Yo fui derrotada.
Tú te rendiste.

viernes, 11 de diciembre de 2015

Que triste

Qué triste resulta saber que tienes todos los motivos a la vuelta de un parpadeo y ser incapaz de verlos porque alguien algún día te robó los ojos para siempre; andar a tientas no está hecho para los torpes. Qué triste y bonito resulta dedicar palabras a criaturas voladoras pero ciegas; seres que solo aterrizan para dejarte acariciar su sombra, salvarte y volver a dejarte en tierra. Por todos es sabido que es imposible volar de la mano sin alfombra, aunque me empeñe en convencerte en cada traspiés que una vida sin imposibles solo se trata de un sueño; que tú no eres un reto sino la ternura hecha anhelo, pero con astillas; que estaría delante de cada una de tus pesadillas el día que decidieras que no puedes más y ya, solo eso, aunque cada día me ahoguen más tus esquinas. Pero qué triste resulta querer llenar de poemas tus lágrimas y que al final del día lo único que quede sea un beso en blanco, papeles arrugados que no contienen ni uno solo de tus secretos, momentos en los que me retuerzo y lo único que siento es la necesidad de deshacerme de tu vuelo, de pedirte que me libres de todo lo que no te puedo decir, de disparar tres gritos directos a tu espalda sin avisar y que vuelvas a ser todo lo que viene antes de un abrazo. Pero entonces el viento te hace descender de nuevo, se asoma la sonrisa de tu boca, y yo empiezo a temblar y sonreír, lo vuelves todo tan triste y tan bonito. Y aunque te ofrecí las manos más calientes del invierno me resulta imposible luchar sola contra el frió; aunque me relegaste junto a las metáforas al baúl de los secretos y las ausencias se hayan vuelto algo tristemente avezado; aunque algunos días te tenga más miedo que ganas y otras esconda tu nombre entre mis manos; la tristeza deja de ser tristeza al mismo tiempo que repartes tus vocales por mi almohada, y todo acaba volviendo hacer lo que empezó, y a pesar de que nunca estas cuando abro los ojos a veces ocurre y te siento pequeñito dando las buenas noches a través de las rendijas, esas en las que escondo tantos secretos como días quiero que sigas aquí.

Pero siguen siendo tristes todas esas historias de desamor en las que siempre hay alguien que pierde la mano de otra persona en la multitud sin darse cuenta y nunca se vuelven a ver. Sigue siendo triste esa continua necesidad de que aparezca alguien que te salve, cuando en el fondo lo que quieres es vivir sin hacer ruido escribiendo sobre grandes historias que no vivirás. Sigue siendo triste sentirte pequeñita y ver gigantes en personas solo porque te han roto tantas veces que, aunque lo intenten, ya no pueden reconstruirte. Sigue siendo triste llevar una vida abocada a la imposibilidad, aunque al final sea lo único que inspire.

Y deberías saber que mi mundo es una noria en la que gira una y otra vez el mismo corazón roto en distintas cabinas; que aunque sea minúsculo te llevaste un trozo el día que me pensaste mientras llovía y ahora sonrió a trompicones; que idealicé tanto el drama y el desamor que me deje llevar por una vida Kamikaze, coleccionando soledades y cigarros rotos, y ahora es demasiado tarde para crecer ; que no me dejare alcanzarte porque empiezo a pensar que no existes, y eso es algo que no sé si sabría explicarte.

Que puedo hacer yo si contra ti solo tengo frases deshechas.
Parece que tienes miedo a arrancarte del todo de mis entrañas, pero tu cobardía no evita el daño. Hazlo de golpe, antes de quitarte el pantalón.
Detesto a la persona que eres cuando no estás.
No necesito a alguien que vuele, necesito a alguien que me enseñe a volar.
Te desesperare hasta que aparezcas.

A veces te destrozaría entero con palabras y otras, sin embargo, solo quiero dejar de escribirte.
A veces, por la noche, me pregunto cómo serás enamorado. A veces por el día, me importa una mierda.

Pero.

No me salves de ti.

jueves, 10 de diciembre de 2015

Explícame...

Tienes que explicarme un par de cosas... tienes que hacerlo antes de marcharte.... es tu obligación y mi necesidad de no quedarme con la más dura de las ignorancias, me lo debes y te lo pido porque nunca, nunca te pedí nada 
....no sé por qué no encuentro la diferencia entre un momento y toda la vida ....contigo fue exactamente lo mismo ...no sé por qué en lugar de acariciarte lograste que me metiera debajo de tu piel ....no sé por qué le enseñaste a mis manos a decirle cosas a tu cuerpo si después no las ibas a oír, no quería aprender a escuchar tus silencios y sin embargo hiciste todo lo posible para que los escuchara, no sé por qué te di todo lo que yo necesitaba para seguir viviendo a sabiendas de que no me lo devolverías jamás... no sé por qué dejé entrar un sentimiento nuevo si supuestamente ya me los conocía a todos..... 
no sé por qué todo esto me parece una alianza entre mi corazón y tu frialdad cuando en realidad mi razón nunca estuvo de acuerdo. No sé por qué te expliqué mil veces que una lagrima es la firma de tu dolor, si nunca lo ibas a entender ....no sé por qué usé quinientas palabras para decir una, si, siempre fui un desastre con las matemáticas de los sentimientos... lo que sí sé es el costo de todo esto,lo que sí sé es el dolor de esto que es la verdadera medida.....y lo que no voy a saber jamás ni vas a poder explicármelo es por qué elegí una ilusión contigo a una realidad con otra persona ....no sé por qué.

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Si no me vas a dar las manos al menos chocalas

Tengo esta desnudez que no sirve de nada
como si solo estuviese arrugando un folio para
tirarlo a la papelera.

Después lo cojo
y lo vuelvo a lanzar
y lo vuelvo a coger.
Así
una y otra vez
y otra
y otra.

Pero yo sigo sin ser otra.

Tengo esta soledad que me sirve de todo
como si solo estuviese estirando el plástico
con el que esterilizarme.

Un muro por la independencia.
Con una frase a modo de esquela que solo diga:
No necesitas a nadie.
Amar al margen.
De todo.

Como verse a uno mismo creyéndose sus propias mentiras, eh?

Si me ves llorar, es porque se me metió la velocidad en los ojos.

Oigo el rugir del viento y pienso:
soñaba mejor en tu risa.

¿Sabes qué?
quizá no sea tanto por las mentiras que te dices
si no por las verdades
que te callas.

Tus pistas de absurdo asesino en serio.

Como cuando alguien te sonríe mientras se cuelga el cartel de
“estoy bien, solo he cerrado por vacaciones”.

De quién es la culpa:
¿de quien no tira el penalti o de quien lo falla?

Cambio hogar por escondite.
Tiempo por dinero trabajando.
Cambio privilegios por responsabilidad.

Cámbiame, que no llevo suelto
el ser libre.

Hasta la furia podría cambiar
por un beso de tranquilidad,
a cambio.

Pero no cambio cicatriz por medallas, así que deja mis heridas en paz.

He llorado hacia dentro
regándolas
mis heridas.

Y han echado raíz.
En mí.
De algo.

Y no sé que es pero está creciendo
como frutales en primavera,
como grietas en una casucha.

Ni siquiera sé
si me da valor
o miedo.
He tratado de besarlo con mi saliva,
pero dice que solo quiere mis lágrimas.
Y fuego.
¿Tienes?

Un palacio de silencios cabizbajos donde pedir perdón es osadía
y el orgullo se traga como el semen: a disparos.
Con un paisaje de cortinas y ninguna fe.
Derritiéndose en sus propios peldaños.

Un museo de cera donde cobijarse
en caso de incendio.
Eso era.
Todo lo que supe construir.
Sin vivir en el intento.

Solo estaba jugando al basket con cigarrillos y papeleras, señor,
solo estaba jugando a mentir,
a bajar la ventanilla sin gritar.
Donde poder pudrirse uno a gusto
mientras el tiempo derrite las fuerzas que ya no tienes
y las que todavía te faltan.

Buenos besos
muchas noches
hasta mañana.

sólo muerta no lo sentiría, no te sentiría.

Mi amor:  tú eres como mi miedo
Siempre te llevare.
Y sin embargo
sigo siendo valiente,
y me pongo de frente.
Y sin embargo no se puede vivir sin el,
sin el miedo.
aunque sepas vencerlo, siempre lo sientes.
Así eres tú,
no te pierdo, te llevo.
te siento
las 24 horas del día 
pero sobrevivo.
No estamos muertos.

martes, 8 de diciembre de 2015

Vamos a dejarnos llevar

Vamos a rentar un departamento sencillo, trabajar medio día, dedicarnos a querernos y alternarnos para apagar la luz por las noches aunque tú siempre estés más cerca.

Vamos a darnos la espalda en la madrugada, buscarnos cuando calculemos que ya va a amanecer para abrazarnos y despertar pegados.Vamos a hacer el súper y comer sano y adivinar el postre que uno que otro día se nos antoje a cada uno. Vamos a hacer un libro para escribir todo lo que nos pasamos platicando en las tardes con lluvia aunque lo lea nadie más que tú y yo.

Vamos a quitarnos la ropa y dejarla por todos lados y lamernos por todos lados y sonreírnos por todos lados. Vamos a poner música de esa que se escucha viendo al techo mientras me tomas apenas de la mano y yo susurro cosas que no escuchas pero entiendes muy bien. Vamos a ver películas que me tengas que explicar después, vamos a hablar en otro idioma y terminar besándonos como nunca habíamos besado antes.
Vamos a confesarnos secretos de la infancia y a hablar de las familias y los miedos y el presente, vamos a inventarle soluciones improbables a todos los problemas que aquejan al mundo. Vamos a leernos en voz alta hasta que uno de los dos se quedé dormido. Vamos a tomarnos fotos, vamos a andar descalzos, bañarnos juntos y bailar a oscuras. Vamos a terminar los días exhaustos, discutir a veces, dejar los trastes sin lavar aunque sea un día y poner las llaves donde no nos vamos a acordar que están. Vamos a dejarnos solos de vez en cuando, a vernos mucho tiempo frente al espejo, a cuestionarnos cosas que no preguntamos con nadie más. Y vamos a querernos. A no fijarnos del tiempo. A cumplir promesas que no hayamos hecho y aventurarnos a la costumbre de que estar juntos se sienta tan bien.

lunes, 7 de diciembre de 2015

No te me olvidas

Creí que te podía olvidar, 
a pesar que un día yo juré, 
qué nunca lo haría, 
y otra vez me equivoque. 

No hubo una relación, 
no existieron caricias y besos, 
mucho menos hicimos el amor, 
simplemente el sentimiento se me dio. 

Pero quien entiende al amor, 
no me explico ni el momento, 
el lugar o la forma como sucedió, 
quizá tu amable trato me confundió. 

Y me enamore de ti, 
y muchos días me hiciste feliz, 
no importaba mi futuro, 
solo quería ser tuyo. 

Quería pasar mi vida a tu lado, 
y tu ni me habías notado, 
como amigo me tenias contemplado, 
pues tu corazón estaba ocupado. 

Pero nada de eso a importado, 
y el amor de mi vida, 
es un título que te has ganado, 
y nunca debes dudar. 

Que ni la distancia ni el tiempo,
 ni mis nuevos sentimientos, 
borrarán el pasado, 
o tus bellos ojos claros. 

Pues llevo en mi pecho, 
tatuados recuerdos y no te he olvidado, 
solo aprendí a vivir sin ti, 
pues tu no sentiste lo mismo por mi. 

Llegarán otros amores, 
y también nuevos dolores,
 pero tu el amor de mi vida, 
no te me olvidas, 
no te me olvidas...

-A. H.

domingo, 6 de diciembre de 2015

No te vayas

-No te vayas aún.
-Aún nos queda una montaña que subir completa, una luna que sacar de entre las nubes, 765 estrellas fugaces que cazar, 400 fotografías que tomar, 326 charlas que iniciar y 245 más con las cuales bienvenir el amanecer, 84 carreteras que recorrer y como 100 bosques en los cuales caminar... Ah y una tercera eternidad.

sábado, 5 de diciembre de 2015

Hoy.

Como una extraña
entre extraños he caminado
hasta sentirme distinta
o únicamente normal
un nadie igual que cualquier otro
pero diferente de todos los demás,
Nadies.
He caminado
como si nada pudiera hacerme daño,
si tu no quieres.
Luego he pensado si todavía querrías...
Quererme.
Ahí he parado
de pensar.
Solo soy alguien más
que echa de menos tarde
y mal.

miércoles, 2 de diciembre de 2015

martes, 1 de diciembre de 2015

Ojalá

Ojalá y este frío cale tus huesos
ojalá que este invierno te abraces de mi ausencia
y tu cuerpo se agriete sin mis besos
ojalá que las mañanas te sepan a hielo
y por las noches no puedas conciliar el sueño.
Ojalá...

Ojalá sólo me recuerdes…

lunes, 30 de noviembre de 2015

Si te hubieses quedado.

Si te hubieses quedado
te habría enseñado a ver el pedacito de mi  mundo,
habría querido  encontrarme en el tuyo.
Habríamos rescatado las cosas buenas de los dos
Para formar uno solo.

Si te hubieses quedado
te pediría salir a caminar al parque
o a un café con buena música.

Si te hubieses quedado
seguramente te seguiría diciendo a toda hora que te amo
y que cuando te vas te echo de menos,
que cuando no estas no dejo de extrañarte
aunque todavía no te hayas ido.

Si te hubieses quedado
te haría ver las películas
que seguramente te aburrirían
pero que siempre valen la  pena ver.

Si no te hubieses ido
te hablaría de mis últimos libros que he leído
Y yo escucharía con atención de los tuyos.
Compartiríamos cual fue nuestra mejor parte.
Te hablaría de las últimas películas que en el cine han sido un fracaso
De las que nos emociona ir  a ver y de las que esperamos con ansias.
Si siguieras aquí romperíamos cada lagrima y el dolor con besos.
Tú no te quedarías sentado viendo películas toda la semana
yo no me la pasaría escribiendo.

Si te hubieses quedado
te seguiría hablando de los problemas de nuestro país
De lo absurda que es la gente,
y lo importante de no ser como ellos:
los que no hacen nada “porque nada va a cambiar”.
Tú seguirías aquellas opiniones negativas
Y yo te seguiría tratando de jalar de este lado.

Si no te hubieras ido
seguiría viendo mi futuro de tu mano
Y no habría tirado todos los planes a la basura.
Seguiría preparando sorpresas para cada aniversario,
para cada cumpleaños,
para cada fecha significativa.

Si no te hubieras ido
me seguiría bañando los domingos.
Seguiría creyendo que solo a mí me  has regalado la luna
Seguiría esperando aquella serenata sobre el carro;
tu y yo bajo las estrellas en aquel lugar.
Seguiría defendiendo a tu perro de ti.
Y colocaría aquel dibujo que nunca llego
en la primer página
del primer libro que escriba.

Si te hubieses
quedado nuestras manos seguirían entrelazadas.
Seguirían siendo un puente
para dejar pasar las heridas.
Y mis manos no estarían vacías
y las tuyas no estarían esperando ser agarradas
por alguien más.

Si te hubieses quedado
pasaríamos alguna tarde jugando ajedrez
o tal vez tomando café.
Te seguiría grabando mientras duermes
para no olvidar que desperté a tu lado.
Te seguiría sacando fotos y pidiendo  que poses para mí.
Seguiría pidiéndote que bailes, que bailes solo para mí.
Y que me modeles tu ropa interior.
Te seguiría cantando aunque mi voz no sea buena melodía.
Y te seguiría pidiendo que me cantes aunque nunca quisieras hacerlo.

Si te hubieses quedado
 te seguiría esperando a media noche para cenar
 y ver alguna película (sin nadie más en casa).
Te propondría tomarnos una copa
de vodka e irnos a la cama y no dormir.
Pero, te fuiste…

¿Por qué? 

viernes, 27 de noviembre de 2015

Seducir a la moral

Esta noche no dormiré en casa
me hace falta, faltar a los lugares
a los que siempre llego.
Esta noche voy a bailar,
mi cintura romperá cadenas
no tendrá más un dueño,
esta noche me voy a olvidar
de todos los brazos en los que he existido
para existir en otros.
Esta noche, es mi noche.
Voy a lucirme sobre una mesa
con algunos tragos de más,
voy a seducir a la moral
ya verán como la hago mía.
Después de esta noche,
después de una, se rompen todas.

jueves, 26 de noviembre de 2015

La danza que no baila

Debo ser muy preciso para hablar de ello. Primero que nada, me es necesario aclarar que no sólo no me gusta bailar sino que me considero incapaz para vincularme con la danza en sentido estricto. Digo, ahora sí, qué me gusta. La soledad y la paridad de los danzantes que se realiza en forma paralela todo el tiempo hasta el momento del encuentro; luego caos por un rato y luego encuentro, éste definido por la letra de la canción (que vale la pena no sólo traducir sino buscar también las referencias literarias y mitológicas); encuentro, disparidad y luego comunión. El instante del abrazo y el momento, único, en que se hacen luces; después compañía y abrazos ¿había usted visto antes a alguien danzar abrazos? Finalmente el eterno destino entre los hombres, separación, pero no sufriente, muy cercana a lo libre y luego la unidad misteriosa. Pareciera un montaje de un sitio sin nada más que la danza y lo que ésta convoca. Es, claro, una historia sencilla pero relatada de manera exquisita. Lo que me lleva a decirle que, aunque usted no lo crea, yo bailo y mucho, mucho más de lo que podría imaginarse, pero no siempre hay sitios dónde bailar porque casi ninguna danza se hace con libertad y soy enemigo de las normas, así que espero los sitios, la música, el entorno y la pareja o los buenos amigos, con ellos también se baila. En fin, espero haya usted disfrutado del obsequio tardío; sé que es usted una buena escritora, talentosa para retratar momentos y tamaños, es usted relatora de afectos y potencias; yo soy un poco menos que eso, pero me gusta dejar que el entorno me haga frente y le comparto esto con cariño y esperando sacarle una sonrisa.

martes, 24 de noviembre de 2015

Al borde

Las tardes suspiraban esperando el encuentro
como quien esnifa una raya de cocaína
para sentirse duro y creer que tiene la situación controlada.
Una pérdida de tiempo constante
en el tic tac de unos pazos que nunca terminan de llegar.

Miro resignada las calles.
Giro las esperanzas por si cruzas las esquinas distraído
con mis manos desolladas en tus bolsillos
y me devuelvas,
por favor,
las miradas de tus ojos que ya no lloran
por este cuerpo demacrado que flota en tú recuerdo.

Te mando señales de humo en cada calada de cigarrillo
por si te da por mirar el atardecer por la ventana.

Yo ya no te comparo con el sol.
De él tengo la constancia de la madrugada,
de ti ya no espero ni el anochecer.

Ni la más áspera caricia de entusiasmo
calma mi sed.

Sigo jurándome poeta sin mis dientes mordiéndote.
Como si fuera fácil desprenderse de un sentimiento
que todavía arde dentro de mí.

Me distraes y me alejas de todo lo material.

Gracias por este sueño que quizá nunca termine,
pero es lo único que me mantiene con vida.

domingo, 22 de noviembre de 2015

Que hasta el amor más grande acaba

Después de un par de días mi dolor era realmente desastroso me moría en vida por él, lo extrañaba, en verdad mi vida no tenía ni un sentido sin su voz, sin su cuerpo, sin nada que viniera de él, sentía que ya no podía más.

Una tarde como todos esos días, me levante como eso de las 2:30 pm Salí un momento de mi cuarto e intente comer algo pero fue inútil no tenía apetito, me servía un plato de comida con toda la intención de comer pero al final la comida quedaba intacta. Recuerdo perfecto que a esa hora era el lapso en que de repente mi hermana con la que vivo no estaba en casa, iba a dejar a mi sobrina a la escuela en turno vespertino. Yo aprovechaba ese lapso para salir del cuarto para que no me viera y se diera cuenta que lloraba. Intentaba comer pero después de ver que no me apetecía nada lo único que forzosamente logre ingerir fue un yogurt, después volví a las cuatro paredes de mi habitación y fue inevitable que al entrar no se viniera a mi mente él, las lágrimas simplemente no las podía contener el dolor que sentía era tan grande! Que sin sentir, las lágrimas me escurría una tras otra sobre mis mejillas, quería gritar; gritar, llorar fuerte, muy fuerte pero jamás lo hice siempre fue en silencio, mis lágrimas mi dolor, mi sufrimiento, mi tristeza fue en silencio jamás nadie tuvo sospecha ni se dieron cuenta de lo que pasaba en mí, en mi vida, fuera de mi cuarto siempre fui la misma, excepto de aquellas personas (pocas), que les conté por lo que había pasado unos cuantos amigos y nada más. Esa tarde después de entrar a mi cuarto no hice otra cosa que llorar, llorar y llorar hasta como a las 2 de la mañana que trate de controlarme un poco y me metí a bañar y aun así en la regadera seguía llorando, Salí con la toalla enredada y el pelo mojado recogido con una liga, volví a entrar al cuarto y proseguí con mi llanto que era imparable por más que trataba no podía controlarme, lo que sentía era más fuerte que yo, me desgarraba el alma sentía que había perdido todo, esa noche me dormí llorando, en mis sueños apareció él, eso me hizo despertar a las 6 am, desperté llorando y pensando en él , en ese momento ya era incontrolable mi dolor mi desesperación, mi llanto pero sobre todo el inmenso amor que me ataba a él, en verdad aun a pesar de eso ahí estaba mi orgullo acompañándome todo el tiempo aunque la desesperación me gano; tome mi celular, lo llame, su teléfono me mando a buzón marque al otro número y nada, marque al otro y tampoco eso me partió el corazón. ¿Como era posible que no entrara a ninguno de los tres números?, siempre andaba trayendo mínimo uno, eran las 6 de la mañana era imposible que no tuviera señal y menos que a ningún numero entrara mi llamada, insiste hasta que me cansé, a las ocho y media. Más de una vez trate de contener mi llanto pues sentía que las fuerzas hasta para llorar me abandonaban, pero era inútil no podía cada vez aumentaba mas mi llanto, lo peor es que era en silencio y eso era más frustrante, ver que mi llamada no tuvo ningún éxito me hizo pensar que en verdad el ya no quería saber más de mí y que había cambiado su número eso me hirió de una forma fatal sentí que había perdido todo, todo… que se me había ido de las manos el amor de mi vida, pero sin pensar más me dije a mi misma;

-ya basta no puedes seguir así ya basta levántate, mira que el día pinta lindo esta mañana tienes que recuperar tu vida seguir adelante, recuerda que tienes que ir a trabajar no puedes ir con los ojos hinchados, vamos levántate, pon tu mejor cara y sonríele al mundo.

Ese día me decidí; me levante agarre mi reno con el que me dormí abrazada llorando toda la noche, lo agarre con fuerza lo abrase fuertemente y le dedique mis últimas lágrimas, lo abrase fuertemente y le dije –hasta aquí lloro por ti continuare con mi vida, me mire al espejo me limpie mis lágrimas, me vestí con un pantalón “x” la primer blusa que encontré y un suéter largo gris, me enrolle el pelo en forma de una cebolla y lo atore con una pinza, me puse unos lentes grandes oscuros con el marco color blanco volví agarrar mi reno lo abrace, me tome unas fotos (algo no muy normal pero lo hice), cuando me puse dispuesta a salir de casa regrese por mi reno lo abrace fuerte como si me estuviese despidiendo de "él" después lo deje en mi sillón, lo mire, y me di la vuelta hacia la puerta y me fui, si todo se quedaba en ese cuarto, se quedaba ese reno que me regalo un 24 de diciembre en navidad lleno de globos, chocolates y dulces con una carta adentro, una sonrisa en el rostro de él y en el mío felicidad ternura y mucho amor. 

Mi destino de ese día era en Q., llegue a la terminal de autobuses y compre mi boleto, espere unos cuarenta minutos en lo que salía mi autobús durante ese tiempo me senté en una parte de la terminal donde estaba sola y vacía solo estaban unas cuantas bancas, me limite a observar a mi alrededor mientras esperaba, en mi cabeza de repente se venía él a mis pensamientos pero trataba de reemplazarlo por otras cosas aunque en realidad en ese tiempo no había mucho que me distrajera pues me encontraba en una situación difícil que pensar en otra cosa me recordaba que sin él no tenía fuerzas para seguir donde estaba, llego el momento en el que tuve que abordar, llegue a mi asiento de lado de la ventana, mi favorito, me gusta ir observando me deja pensar a gusto recordar perder mi mente en algún momento o imaginación, aunque en ese momento no era muy conveniente pero aun así ahí me quede observando mientras escuchaba música, cualquier música me recordaba a él. El autobús me hizo recordar esas veces en las que viajaba para ir a visitarlo a Z., aquellas veces en las que viajamos juntos, fue inevitable no recordar aquella vez que nos escapamos juntos a la playa, pasamos a Martínez de las torres nos hospedamos en un hotel algo sencillo pero cómodo, salimos a tomar un helado a recorrer el centro, tomamos fotos, fuimos al cine… regresamos al hotel entramos a nuestra habitación, después de un rato el salió, en realidad no sé qué paso no dijo nada solo salió me quede un poco desconcertada y un poco triste el entro no dijo nada yo tampoco, pero me moleste un poco, el después dijo que era el calor y quería salir a refrescarse “x” lo deje así me hice la dormida después él se durmió y a continuación hice lo mismo a media noche me despertó, con una mano acariciaba mis senos, con la otra mis genitales mientras besaba mi cuello de una forma muy excitante, me di la vuelta lo bese deje que sus caricias envolvieran mi piel, que sus besos atraparan mis suspiros, éramos él y yo solos en una aventura, nuestra aventura, éramos; amigos, novios, amantes, cómplices… lo hicimos dos veces y después nos dormimos, la mañana siguiente nos dirigimos a C.E fue un recorrido hermoso, lindo e inolvidable jamás me quejare de la manera en que me trato siempre fue un hombre lindo y respetuoso conmigo aun a pesar de sus tantos errores nunca me dejo sola, fuimos una sola persona siempre accesibles a cada uno, fuimos tan unidos que nuestra libertad venia sola; si, en nuestra unión, seguridad y confianza estuvo nuestra libertad…
Pero como todas las cosas, esto también acabo. Pero seguimos siendo lo que nos prometimos -nunca dejarnos solos- y me siento orgullosa de ello. No se cuanto dure esta promesa pero se que a pesar de que no nos veamos, nos importamos mucho por todo lo que fuimos y que pase lo que pase, si algún día lo necesito podre correr hacia sus brazos, solo para que me abrace. que mis brazos también serán su cuna. 

sábado, 21 de noviembre de 2015

Hoy, ya no.

No, hoy no…
Hoy no quiero lastimarme,
Hoy no quiero ver rodar mis lágrimas frente a un espejo

Hoy no.

No quiero saber de ti,
no quiero ver tu fotografía sobre mi buró
no quiero recordarte, no quiero pensarte
no quiero desear tú presencia.
Hoy no quiero herirme con tu recuerdo
con una historia rota.
No quiero verte ni saber de ti,
no quiero lastimarme más,
no quiero herirme yo misma
viendo cómo eres feliz sin mi
caminando con alguien que no soy yo.
Me duele saber de ti.
ya no quiero más pensamientos tuyos.

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Un sueño hermoso

El sábado te soñé… Ya te había soñado días antes pero en ese sueño solo vi tu indiferencia atravesando mi pecho con el nudo de tu cuerda apretando mi cuello y mi cara a punto de estallar en llanto. Nuevamente estabas tú tal cual con toda nitidez con tu semblante serio y ausenté tan lejano de mí, otra vez apareciste en mis sueños con tu imagen completa con tus facciones y ademanes intactos. pero no, este último sueño el del sábado fue diferente. 

Esta vez… esta vez, estábamos sentados dentro de la camioneta tú al volante y yo de copiloto… sonriendo, tú me sonríes y me das la mano, hemos vuelto siento en mi corazón. Y sonrió contigo te sonrió, estoy feliz puedo ver en tu cara la misma felicidad vuelvo a ver a aquel hombre que me ama, me hace sentirlo. Te veo entregado a nuestro amor. Entre mi sueño me siento libre, completamente tranquila, sonrío como tonta, te mando besos de piquito, luego intento besarte estiro mi boca esperando un beso, te recargas contra la ventana y haces que me estire para alcanzarte, extrañas mis besos, deseas besarme. Cuando logro estar lo más cerca de tu boca interrumpes el éxito de aquel beso con una caricia, pasas tu mano por mi mejilla con delicadeza y apartas a un lado mi cabello. Me jalas hacia tu pecho y me abrazas, me abrazas tan fuerte con tanto amor como si me metieras dentro de ti para protegerme para que nunca más me vaya, para que nunca más puedas soltarme, me has vuelto a construir en tus abrazos, en un solo abrazo. Me hago para atrás y te digo que me encantas, salgo de mi cintura para arriba por la ventana de la camioneta con las manos alzadas agitándolas como una señal de victoria, de felicidad y libertad. Grito que soy feliz, me siento libre, es porque te tengo porque has vuelto, porque hemos vuelto otra vez, tú y yo aquí en un solo espacio en nuestro pequeño espacio, mi corazón está de fiesta baila con su sonrisa por los cielos, salta de felicidad. Tú, tú solo me miras con ternura y sonríes, me sonríes con una cara de adolescente enamorado, me vuelvo a estirar desde mi asiento para besarte, te acercas un poquito para que yo pueda alcanzarte estiro mis labios para que alcancen los tuyos y juntarlos en un beso pequeño y tierno tú haces lo mismo, y entonces mis ojos se empiezan abrir y entre mi sueño y la lucidez de la mañana siento como alguien me jala del brazo yo me resisto, trato de estirarme más para alcanzar tus labios pero no alcanzo a besarlos y despierto… 

Fue solo un sueño. Un hermoso sueño.

¿Te habrás venido a despedir de mí, me habré despedido de ti; como un regalo final para mí?

viernes, 6 de noviembre de 2015

21 De Septiembre


Feliz cumpleaños


Estamos a menos de tres horas de que termine tu cumpleaños y… no logré abrazarte ni una vez durante este día. No sé si es triste o sólo circunstancial, >casual< dirías tú, lo que sé es que este día ha terminado con una centena de abrazos que se quedaran guardados en un espacio en no sé dónde dentro de mí y esperarán tomar formas más adecuadas para llegar a ti.

No quiero hacer de este texto un drama ni nada parecido, no te vi y punto, mis ojos te esperan y mis ganas con ellos. El problema es que es tu cumpleaños, el primero que paso consciente de ello y tengo canciones atoradas en los dedos y besos ahogados en la boca y caricias endureciéndose en las manos y te quieros que se aglutinan en mis intenciones y no encuentro el sendero, el camino para desahogar un entusiasmo que solo a ti pertenece.

Es tu cumpleaños. Es tu cumpleaños y yo… ¿Qué hago aquí? Y tú ¿Qué haces allá? ¿Dónde estamos cuando deberíamos estar abrazados? ¿Cuándo deberíamos hablarnos y escucharnos cada instante? Es tu cumpleaños y por más que volteo no encuentro tu imagen, por más que respiro no siento tu olor ni tu sabor en mi universo. Es tu cumpleaños y parece que lo único que me queda es estar frente a una lap top imaginando que escuchas estas palabras, que leeré para ti en algún momento. Es tu cumpleaños y he decidido hacer lo único en lo que nadie, jamás podrá detenerme. Es tu cumpleaños y he decidido escribirte. 


¿Pero qué se le escribe a alguien que seguramente ha escuchado mucho? ¿Qué le escribes a alguien a quien quieres hablarle con la totalidad de tu existencia? ¿Te escribo que te quiero? ¿Qué me haces falta? ¿Qué has dejado al mundo un color que no conocía y que anhelo ver cada momento? ¿Qué te escribo? ¿Lo que quiero? eso ya te lo sabes ¿lo que no quiero? eso sobra. Dime entonces, ¿Qué se le escribe a la belleza si de por sí ya es bella? ¿Te escribo lo que pienso? ¿lo que eres? ¿En lo que te has convertido? ¿Te escribo que eres hermosa? ¿Qué eres grande? ¿Qué eres perfecta? ¿o te escribo como apareces en mi vida cada vez? ¿Qué eres luz, entusiasmo, ganas, espíritu y aire, que eres día a la mitad de una larga noche, que eres juventud, que eres quien saca cada día más mis huesos de un sepulcro al que parecían resignados; que eres quien me ha dicho al oído que no me rinda, que estoy vivo y que soy capaz, que aún puedo volar, que mis alas duelen pero están vivas, entumidas pero fuertes, como antes, como siempre y que tu cielo me espera para volarlo y que tu aire quiere curarme de mí, de mi letargo? ¿Te digo que eres esperanza, dicha, anhelo? ¿Te digo que eres voluntad y fuerza? ¿O que eres un susurro cerca de mi oído que se vuelve besos y lengua y caricias y cuerpo y sudor y cercanía y comunión y completud y complicidad? ¿Te hablo de la complicidad? ¿De cómo parece que nos hemos conocido desde siempre, al grado de que nuestros cuerpos parecen haber estado mucho tiempo antes juntos, antes incluso que nuestras conciencias que se encontraron aquella noche en aquel beso al que me invito tu cuello? ¿Qué te digo, ay, amor que renace? ¿Qué nadie antes me había besado como tú, con una entrega que pensé que no existía? ¿Qué tus besos no sólo me reaniman sino me rescatan de mí, muy de mí? ¿Qué tus ojos me miran como no me habían mirado hace milenios, que en ellos soy lo que no puedo ser sin ellos, bello, grande, amado? ¿Qué tu amor, que es tuyo, ha volteado hacia mi mundo y me invita a amarlo? ¿Qué tu piel me invita a escribir, a escribirme? ¿Qué tu voz es el ritmo que me devuelve a una música que pensé no escucharía ya nunca más? ¿Qué te digo, que te estoy amando? ¿Qué lo hago por quién eres? ¿Por qué eres la chica que me cautivo con una mirada, quien me hizo ser obvio y hacerme reconocer por todos como un tonto cautivado por una niña? ¿Por qué eres la niña de diecinueve años que cumplió 2¿? En un instante, en una sola noche? ¿Por qué eres, si tú Astronema, la villana que se hace villana porque las villanas no lloran ni llorarían jamás, aunque las empujen otros? ¿Por qué eres Ariel, sirena, sirenita por la que yo daría también mis piernas y mi voz, por la que me haría espuma para hacerme tu océano y tu hogar? ¿Qué te escribo, dime, qué te escribo? ¿te escribo la noche, una más? ¿te escribo mi sueño que ya no llega más desde que lo robaste aquella primera noche? ¿te escribo mi gusto que se llama con tu nombre? ¿te escribo mi paz que son tus brazos? ¿mi alivio que es tu boca? ¿mi refugio que es tu alma y tu piel y tus brazos y tu sudor y tu voz, si tu voz con la que dices no pares y ordenas que te ame como nunca, como a nadie? ¿Qué mi hogar son tus palabras, cada una de ellas y mi descanso tus detalles, tus mensajes, las caritas con las que me despistas cada mañana mientras trabajo? ¿Qué te habito y que me habitas? ¿Qué te escribo? ¿Qué no debería de estar aquí sino ahí dondequiera que estés tú? ¿Qué quiero salir corriendo a tu encuentro no importa cuan lejos y cuan tarde sea? ¿Qué no te vayas nunca? ¿Qué me hagas seguir escribiendo y cantando, si, cantando? ¿Qué me sigas haciendo aprender canciones? ¿Qué me sigas enseñando a tocar la guitarra, para cantar a tu lado? ¿Qué no te lleves mis noches, que solo son noches cuando estás ahí presente? ¿Qué me sigas haciendo dormir las mejores dos horas del día después de besarte durante cuatro anteriores? ¿Qué no me sueltes porque casi salgo del infierno y puedo iniciar el ascenso a tu cielo? ¿Qué no te vayas, por favor no te vayas, no ahora que has salvado a un viajero perdido en ninguna parte? ¿Qué creas? ¿Qué me creas? ¿Qué no dejes de creerme? ¿Qué olvides lo común, que aquí hay alguien que será todo menos común en tu vida? ¿Qué me esperes, poquito, poquitito? ¿Qué quiero ver luciérnagas contigo? ¿Pintar paisajes con nuestros ojos? ¿Adornar el mundo con nuestras manos, juntos? ¿Qué me sigas jalando, que casi tu corazón ha curado al mío? ¿Qué este tonto, como me llamas tantas veces, es tonto, torpe y ciego pero camina y sigue un sólo sendero, el de tus palabras? ¿Qué me ames, sin miedo, sin reserva, que soy para ti? ¿Qué has abierto tanto, tanto mis ojos? ¿Qué yo soy lo que me provocas ser? ¿Qué eres un ángel? ¿Qué me sigas resguardando de mí mismo? ¿Qué te digo? ¿Qué no sé escribir? ¿Qué no sé cómo escribirte a ti? ¿Qué me aterra quedarme pequeño ante tus oídos pero que igual mis textos te pertenecen desde ahora? ¿Qué tú los sacaste del encierro y liberaste mi mano para recuperar la literatura? ¿Qué eres poesía y yo quiero ser poesía a tus renglones? ¿Qué soy tu libro? ¿Sólo tu libro desde ahora? ¿Qué me leas? ¿Qué por favor me leas? ¿Qué no dejes de leerme? ¿Qué por favor no dejes de leerme para que yo no deje de escribirme? ¿Qué sí soy tonto pero quiero dejar de serlo o serlo sólo contigo? ¿Qué te quiero, que te quiero, que te quiero, que te quiero? ¿que te amo? ¿Qué amo respirarte y degustarte y… y… y…que te amo toda? ¿Qué seas mi hogar? ¿Qué calientes el maldito frió que sólo cesa a tu lado? ¿Qué soy tonto, que soy tonto, que soy tonto? ¿Qué soy tu tonto? ¿Qué te digo si seguro has escuchado tanto? ¿Qué te digo que te abrace, que te envuelva, que te conquiste? ¿Qué te digo que traiga a mi vida no más mía, si hasta ahora no he podido decirte nada a la cara? ¿Qué te escribo si soy pobre, incapaz, si soy yo quien necesita que lo salven y tú, tú, tan tú quien me sostiene y me esperanza? Ay, ¿Qué? ¿qué? ¿Qué te escribo que saque lo que siento, que me lo arranque y te lo ponga ante los ojos para que lo sepas, para que te enteres que soy sincero? ¿Qué es lo único que sé, que soy sincero? ¿Qué no te vayas, que no te vayas, que no te vayas? ¿Qué no me sueltes? ¿Qué resistas? ¿Qué confíes, que confíes, que confíes? ¿Qué es tu cumpleaños y que lo único que puedo regalarte es mi alma? ¿Qué te escribo si yo no sé escribir de amor?.



-IAD-

*Que a veces, sólo a veces es mejor que las cosas no pasen, que nunca terminen de ser. para que permanezcan siendo hermosas por siempre, para que nunca te duelan, para que nunca dejen de hacerte vibrar... Es mejor así...

jueves, 5 de noviembre de 2015

El principito y la rosa... ♥♥♥


-“Te amo” - dijo el principito…
-“Yo también te quiero” - dijo la rosa.
-“No es lo mismo” - respondió él…

Amar es la confianza plena de que pase lo que pase vas a estar, no porque me debas nada, no con posesión egoísta, sino estar, en silenciosa compañía. Amar es saber que no te cambia el tiempo, ni las tempestades, ni mis inviernos.Dar amor no agota el amor, por el contrario, lo aumenta. La manera de devolver tanto amor, es abrir el corazón y dejarse amar.”

-“Ya entendí” - dijo la rosa.
-” No lo entiendas, vívelo” -dijo el principito.

si todos lo entendiéramos... </3
.
.
.

-Antoine de Saint-Exupéry